El desparpajo de algunos que se dicen “peronistas” es infinito. Es verdad que el movimiento es amplio (digo esto a riesgo de dejar servida la típica comidilla de progres y revolucionarios de laverap), pero también es verdad que se demuestra andando.
Hoy Santilli nos sorprendió por Mitre, la radio del partido opositor, con esta novedad: “Yo tengo ideas propias”, para luego sentenciar: “Me hubiera gustado apoyar a Macri en octubre, ahora tengo ganas de apoyar a un compañero” (léase Narcobañero o Narcoalberto). Ups, el pseudoperonismo festilindo da para todo. ¿Entonces el Niño no era compañero?
Tal vez ahora Santilli deba probar el esclarecedor mazo duranbarbista y algún “¿qué decís boló?” del Señorito. Tal vez le prohíban utilizar el uniforme pro, compuesto por la camisa celeste y la campera de hilo con cierre, a modo de degradación “intraequipo”.
Más allá de esto, ya causa repulsión la insistencia de Santilli y Ritondo en mostrarse como las patas “peronistas” del pro. Tristes figurones nacidos a la luz del neoliberalismo menemista que se esfuerzan en revolear más alto la remera amarilla o demostrar que se saben completas las letras de Gilda cuando el Niño bailotea como un teletubie. Mostrencos, que le dicen.
3 comentarios:
Hay que aguantar cada cosa, Pibe.
esto salio en la seccion clasificados? Los fsicales del PRO saben que van a tener poco laburo contando los votos de Pinedo y unos manguitos mas para la militancia nunca vienen mal.
Lo cierto es que cualquiera se dice Peronista, si le preguntas la historia y quien fue Peron, minga que te responden.
Ya me imagino a Macri en el 2015, re editando el Peornismo Federal (desde la carcel por las escuchas).
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