JUICIO EXPRESS Y EXPULSIÓN PARA EL CURA ALESSIO

“Ha cometido rechazo pertinaz de la doctrina descrita, al sacramento del matrimonio y desobediencia al Ordinario. Ha divulgado por escrito y de palabra por los medios de comunicación en contra del magisterio eclesiástico. Se le prohíbe ejercer en público la potestad sagrada, es decir: celebrar la santísima eucaristía, oír confesiones, celebrar los demás sacramentos y residir en la casa parroquial San Cayetano del barrio Altamira”. Así, Nicolás Alessio, el cura que apoyó la sanción de la ley del matrimonio homosexual, fue expulsado como un delincuente de la Iglesia por la curia cordobesa y de la casa parroquial donde vive hace casi 30 años.

Alessio:

Esa misma Iglesia ni siquiera le ha puesto una sola amonestación a sacerdotes pederastas como el obispo Storni, que vive cómodamente aquí en La Falda, en las sierras de Córdoba; o a Grassi, ambos con condenas judiciales por abusar de menores. Tampoco hubo sanción para von Wernich, condenado por delitos de lesa humanidad. Da la impresión entonces que esta iglesia tolera a torturadores y violadores en sus filas pero no a quien piense diferente y se anime a decirlo en público.

El núcleo del poder en la Iglesia es y ha sido el ocultamiento. El "de eso no se habla". Yo me animé a decir las cosas que creo que deben cambiar. Y eso se paga de ésta manera. Con la expulsión. Les molestó que hable porque la Iglesia es maestra en ocultar. En manejar la impunidad del silencio. Lo del matrimonio gay, encima, aborda un tema que les incomoda y está ligado a la sexualidad. Ellos siguen considerando enfermas o perversas a las personas gay.

Mariano Rapetti (Agrupación Nacional Putos Peronistas):

Esta noticia no hace más que reafirmar el sesgo ideológico de la iglesia y nos hace reforzar la idea de que hay que recuperarla. En este momento está liderada por gente que piensa que pronunciarse a favor del matrimonio homosexual es tantísimo más grave que estar acusado por la justicia argentina de crímenes vinculados con la dictadura. Es muy triste porque gente como Nicolás Alessio de alguna manera nos reconcilia con la religión, con la parte que nosotros reivindicamos del cristianismo, que es justamente la que tiene que ver con el amor al prójimo, la solidaridad… Que le hayan hecho finalmente el juicio canónico al pobre Nicolás nos indigna, nos enteramos hoy y estamos todos muy consternados. Ya estamos poniéndonos en contacto con él para apoyarlo en lo que necesite. Por supuesto, nuestro repudio es enérgico.